Conocer qué es un embargo es de vital importancia para mejorar la gestión de financiera de las cuentas bancarias. Cuando hay una situación de impago, es posible que pueda haber una cuenta embargada. Para ello, es necesario que se produzca una deuda que se imposible de pagar.
Qué es un embargo y en qué consiste
El embargo es una medida de ejecución totalmente forzada. En esta, el acreedor pone en manos de la justicia los diferentes bienes de su deudor. A través de esta acción, un juez los pondrá a la venta en una subasta pública. El objetivo es conseguir el dinero necesario para poder saldar una deuda. Esta medida está regulada a través de la Ley de Enjuiciamiento Civil y Criminal.
A partir de este, los bienes de una persona son retenidos hasta que cumpla con sus obligaciones de pago. Con la cuenta embargada, el propietario no podrá disponer de ellos. Por ejemplo, un coche una propiedad embargada no puede utilizarse para venderse o alquilarse.
Regulación de los activos
El Artículo 592 del organismo legislativo establece los activos que pueden ser embargados. También define qué es un embargo. El primero será el dinero que pueda estar en las cuentas bancarias del deudor. En el caso de no tener fondos suficientes se optará los créditos, derechos o títulos financieros. Las joyas, los bienes inmobiliarios, salarios o pensiones son otros bienes que también pueden ser embargados.
Adicionalmente, todas las personas físicas o jurídicas que son cercanas al deudor tienen la obligación de colaborar. El Artículo 591 de la Ley de Enjuiciamiento Civil obliga a entregar todos los documentos o datos de utilidad. En caso contrario, serían multados por el organismo judicial.
Tipos de embargo
Además de conocer qué es un embargo, también existen varios tipos. Estos pueden ser preventivos o ejecutivos. En líneas generales, sus principales características son:
- Preventivos: los bienes quedan completamente inmovilizados. Seguirán siendo propiedad del deudor pero, como se utilizarán como garantía de deuda, no se podrán disponer de ellos de forma libre.
- Ejecutivos: la finalidad de estos bienes es su venta. De esta forma, se consigue pagar la deuda. Esta se produce a través de una subasta. Sin embargo, también se puede llevar a cabo una dación en pago.
La Ley de Segunda Oportunidad, mecanismo para evitar un embargo
El embargo de cuentas bancarias puede ser una de las situaciones más críticas para un hogar familiar. Sin embargo, existen soluciones para embargos que pueden ser de utilidad. Uno de los mecanismos principales es la Ley de Segunda Oportunidad. Solo al presentar una solicitud de inicio de expediente, todos los embargos quedan suspendidos. Es válido tanto para personas físicas como para trabajadores autónomos.
En el caso de un particular, deberá dirigirse a un notario. Las personas jurídicas o los autónomos deberán hacerlo al Registro Mercantil, o a la Cámara de Comercio. El objetivo será parar los embargos de bancos o de otro tipo.
Para ello, es necesario cumplir con una serie de requisitos. La cuantía no puede superar los cinco millones de euros. Adicionalmente, no se deberá haber utilizado este procedimiento legal en los últimos 10 años. Tampoco deberá haber habido ningún tipo de culpa en la acumulación de la deuda. Otro de los requerimientos es no haber rechazado un trabajo que hubiera permitido pagar el monto pendiente. También, es necesario que el deudor no haya cometido ningún tipo de delito socioeconómico. Por otro lado, no debe pasarse por alto el intento de negociación con el acreedor.
A la hora de saber cómo evitar un embargo, es importante prestar atención al procedimiento de la Ley de Segunda Oportunidad. Este mecanismo se divide en diferentes fases. La primera es la de negociación. Con la ayuda de un mediador concursal, se renegociarán las condiciones del crédito. En el caso de que el acreedor acepte se iniciarán los pagos y se liquidará la deuda. No obstante, si se niega se pasará a la fase judicial. Esta es la más larga. Depende del volumen de trabajo del juzgado, y de la complejidad del caso.
No se puede embargar ningún bien durante el tiempo que dure el proceso
Será el juez el que dictará la sentencia y la forma de pago. Mediante la Ley de Segunda Oportunidad, se pueden solucionar embargos. Tanto en la primera como en la segunda fase no se puede aplicar ningún tipo de embargo. Por ello, las personas que se pregunten cómo puedo evitar un embargo, esta es una opción.
Esto también es aplicable desde hace unos meses a las deudas con la Administración Pública. En este caso, se podrá solicitar una exoneración del 70 % de la deuda. Se incluye tanto la Seguridad Social como Hacienda. El monto restante podrá podrá ajustarse a un procedimiento de fraccionamiento de deudas hasta en 5 años.
Como conclusión, tener conocimiento de qué es un embargo es el primer paso. Es fundamental disponer cerca de abogados especialistas en Ley de Segunda Oportunidad. De esta forma, se conseguirá paralizar un embargo y volver a recuperar el control económico.