La hostelería es una de las ocupaciones más extendidas en España debido a la gran afluencia de turismo y a que, culturalmente, los países mediterráneos estamos acostumbrados a ir a bares o restaurantes en con mucha frecuencia.
Y aunque la hostelería es un negocio muy acorde con cualquier tipo de formación empresarial, es preciso tener ciertas nociones de administración de empresas y, sobre todo, conocer el sector. Lo habitual es que los hosteleros se hayan dedicado a esta labor previamente como chefs o camareros. En caso contrario se corre el riesgo de no conocer lo suficiente lo que implica tener un restaurante.
En cualquier caso, hay 3 consejos que pueden ayudar a gestionar de la manera más óptima un restaurante:
1.Utilizar un software de hostelería especializado
Si hasta hace un par de décadas era impensable que un restaurante contara con un software para gestionar los pedidos, actualmente se trata de un supuesto totalmente necesario. Pero, ¿Qué hace exactamente un programa para restaurantes? Las opciones son numerosas y se puede encontrar, de hecho, un programa a la carta para cada negocio como es el caso de los software de hostelería de Ofi.es. Estas son algunas de sus funciones:
Software Restaurante: El programa con el que podrás gestionar tu negocio 100%.
Comandas con PDA o tablet: El básico. Este software de hostelería ofi.es les permite a tus camareros y personal de cocina tenerlo todo comandado digitalmente.
Web y motor de pedidos delivery: Con la Covid, los pedidos a domicilio se han disparado. Un programa que incluya la gestión de servicios delivery es primordial.
Integración con delivery: Agregado a lo anterior.
App carta electrónica: Es imprescindible debido a que las cartas físicas pueden transmitir virus por lo que se imponen las aplicaciones de carta electrónica.
Software de salones de eventos: Un software de hostelería de ofi.es específico para las salas en las que se realizan eventos multitudinarios.
Agenda y reservas: Dentro del programa de reservas se debe atender a la sección correspondiente de agenda y motor de reservas.
2. Hacer una buena gestión financiera
Un autónomo tiene menos preocupaciones a nivel fiscal que una sociedad limitada pero esto no significa que pueda dejar de lado esta parte tan importante. Al fin y al cabo existen grandes posibilidades de que surjan errores o no se tenga tiempo para llevar la administración a un nivel económico. La contratación de un gestor puede ser la solución.
Recuerda que, en combinación con un software de hostelería, se deben añadir los impuestos de IRPF de los trabajadores y el propio, los impuestos trimestrales así como otros complementarios.
3. Las 3M de la gestión en restauración a rajatabla
La primera es el Menú. El menú es, a fin de cuentas, uno de los motivos más potentes para disponer de un restaurante. La elección de variedad, presentación de platos o la opción de menú para llevar o delivery enriquecerán tu propuesta.
La segunda M es el marketing. La buena gestión del marketing es primordial en todos los negocios, sea cual sea su naturaleza. Actualmente se puede gestionar prácticamente todo a través de la red por lo que resulta primordial combinar marketing digital y tradicional. Existen diferentes agencias dedicadas así como profesionales que por menos de lo que crees te pueden ayudar con tu negocio.
La 3 M es la de Medir. Entender que el ciclo de vida del producto hostelero -la comida- es muy corto por lo que para no gastar más de lo que se debe, se recomienda ajustar los gastos: contratar solo el personal necesario, aprender a delegar y optimizar los gastos en materia prima.