Las compras online han aumentado mucho en los últimos años, pero aún así se estima que más de la mitad de los carritos de compra de tiendas e-commerce acaban abandonados antes de que el cliente finalice su compra.
- 1. La importancia de esta métrica
- 2. ¿Cómo reducir el número de carritos de la compra abandonados en un e-commerce?
- 2.1. Simplificar el proceso de compra
- 2.2. Eliminar la necesidad de registro
- 2.3. Ofrecer varias alternativas de pago
- 2.4. Tener una web segura
- 2.5. Informar sobre los gastos de envío
- 2.6. Tener una web fácil de navegar
- 2.7. Reducir el número de distracciones
- 2.8. Hacer el carro de la compra más visible
- 2.9. Usar un CRM
- 2.10. Aplicar el remarketing
La importancia de esta métrica
Para valorar el éxito de una tienda online hay varios factores a tener en cuenta, pero el dato de los carritos de la compra abandonados (compras que han quedado sin finalizar) es uno de los más importantes.
Nos indica que el cliente ha encontrado la web, ha visto en ella algo que le ha gustado y ha pensado en comprarlo. Pero a última hora ha surgido algún problema que ha impedido que el proceso de compra se cierre.
Esto se puede deber tanto a factores internos de la propia web (carga lenta, no ofrecer determinados medios de pago, etc.) como a factores externos, por ejemplo, una mejor oferta en otra tienda.
El propietario de un e-commerce no puede hacer demasiado para luchar contra esos factores externos, pero sí puede tomar medidas para mejorar los factores internos que se han convertido en un obstáculo para la compra.
¿Cómo reducir el número de carritos de la compra abandonados en un e-commerce?
Aunque cada caso se debe tratar de manera individualizada, analizando los pormenores específicos, aquí van 10 consejos generales que suelen funcionar:
Simplificar el proceso de compra
El cliente que va a una tienda física, ve el producto, lo lleva a la caja y ya ha hecho la compra. Si una tienda online tiene un proceso de compra largo y complejo, está desincentivando las ventas. La compra online debe resultar tan sencilla como lo es en una tienda física.
Si el cliente tiene que dar más de cuatro pasos para efectuar su compra lo más probable es que se canse y se vaya, así que hay que ajustar el proceso de compra.
Eliminar la necesidad de registro
Para clientes que desean hacer una compra puntal el hecho de tener que registrarse y dar sus datos supone una barrera. Por el contrario, la tienda online será más amigable si permite hacer compras en modo invitado. Esto es, sin necesidad de registro.
Ofrecer varias alternativas de pago
Una de las razones por las que muchas personas todavía se resisten a hacer compras en Internet es que no se fían de pagar con tarjeta de crédito por motivos de seguridad. De ahí que las tiendas que ofrecen más alternativas de pago tengan un mayor número de ventas.
Tener una web segura
El certificado SSL, que convierte el http en https, pone sobre aviso al visitante de que está en una página web segura, lo que le animará a hacer sus compras en ella.
Informar sobre los gastos de envío
En muchas tiendas virtuales el cliente no sabe lo que pagará por los gastos de envío hasta que no está en mitad del proceso de compra, y esta situación es una de las principales razones de abandono de los carritos de la compra, así que hay que solucionarla.
Hay que informar a los clientes del importe de los gastos de envío de forma que puedan verlos claramente antes de empezar la compra.
Tener una web fácil de navegar
Gigantes del comercio online como Amazon son un buen ejemplo de cómo una tienda sencilla y muy fácil de navegar puede dar estupendos resultados.
Está bien cuidar la estética y querer tener un sitio web bien diseñado, pero al final lo importante es que el visitante pueda encontrar rápidamente lo que ha ido a buscar. Además, no hay que olvidarse del responsive design, que permite que el contenido se vea bien en cualquier pantalla, sin importar si se trata de la de un ordenador o de un smartphone.
Reducir el número de distracciones
Tiene mucho que ver con lo anterior, una web con demasiado contenido, ventanas emergentes, botones de redes sociales y demás, puede acabar distrayendo al visitante de lo importante: los productos.
El contenido debe ser lo más limpio y claro posible, teniendo cada cosa su sitio. Esto ayuda al visitante a centrar su atención.
Hacer el carro de la compra más visible
Mientras que se puede prescindir de otros elementos visuales en la web, el carro de la compra siempre debe estar visible. Así el cliente puede ver los productos que tiene en él y acceder directamente al proceso de compra.
Usar un CRM
Este software especializado hace que la gestión de tiendas online sea mucho más sencilla. Permite analizar los datos de las visitas y las compras realizadas en la web, lo que ayuda a identificar posibles problemas.
Aplicar el remarketing
Al usar Google Adwords como medio de publicidad no hay que olvidarse de la opción de remarketing en los anuncios. Esto hace que el visitante que ha dejado un carrito abandonado vea la publicidad de la web y de los productos que había seleccionado cuando visite otros sitios, recordándole que todavía puede adquirirlos.
Con estos pequeños ajustes cualquier tienda online puede conseguir que su volumen de ventas crezca de forma importante en muy poco tiempo.