Al crear una página web hay que tener en cuenta que los gustos y las necesidades de los usuarios van cambiando con el tiempo. La estética de las webs actuales tiene muy poco que ver con la que marcaba tendencia hace una década.
Hoy en día lo que más se lleva son las webs dinámicas, que son estéticamente más ricas, son capaces de ofrecer un contenido personalizado a cada usuario y, además, son mucho más interactivas.
¿Qué son exactamente las web dinámicas?
Las páginas estáticas son aquellas que siempre permanecen iguales. Si accedes a ellas hoy, y lo haces dentro de seis meses, vas a encontrar el mismo contenido. Esto, que antes era lo común, ahora genera en el usuario la sensación de que el site está abandonado. Es casi como si una tienda se pasara varios meses sin cambiar nada en su escaparate.
En contraposición a estas web estáticas aparecieron las dinámicas, que son justo todo lo contrario. Son páginas con mucha más “vida”, con un contenido que va cambiando con el paso del tiempo y que busca mejorar la experiencia del usuario a todos los niveles.
Desde el punto de vista de la programación, una web estática se basa en los elementos de HTML, mientras que una dinámica tiene un diseño más complejo y eso permite que su contenido pueda variar y adaptarse a cada usuario sin necesidad de que nadie esté aplicando esos cambios de forma manual.
Ventajas de los sitios web dinámicos
Infinitas posibilidades de diseño
En una web dinámica puedes añadir y quitar elementos según las necesidades de cada momento, haciendo que el diseño sea algo totalmente único.
Aunque el coste inicial puede ser un poco más alto que el de una web estática, esto se compensa rápidamente con todas las ventajas que tiene y con el hecho de que su mantenimiento es menos costoso.
Facilidad para cambiar el contenido
La web dinámica está hecha para someterse a cambios. Es más, los mismos se pueden aplicar de forma rápida y sencilla. De esta forma, cualquier momento será bueno para darle un cambio de imagen a esa web que opera como tarjeta de presentación de tu negocio.
Mejora el posicionamiento orgánico
La actualización de contenidos llevada a cabo de forma constante es algo que Google valora mucho. Por eso, una página de tipo dinámico tiene más posibilidades de posicionarse mejor que una estática.
Diseño responsive
Hoy en día la mayor parte del tráfico que reciben las páginas web llega a través de dispositivos móviles y no de ordenadores. Esto es algo que hay que tener muy en cuenta al diseñar páginas, porque la visualización no es igual en una pantalla de ordenador que en la pequeña pantalla de un móvil.
Las páginas dinámicas son responsive, esto quiere decir que se ajustan de forma automática al tipo de pantalla que está utilizando el usuario. Así queda asegurado que siempre verá correctamente el contenido.
Consigue mayor interacción
En una web dinámica el contenido está repartido de tal forma que facilita la interacción del usuario. Además, se pueden añadir rápidamente elementos como formularios de contacto o pequeñas encuestas.
Los sitios web dinámicos han revolucionado el mundo del diseño y han conquistado a la audiencia. Precisamente por ello, son una alternativa a tener muy en cuenta a la hora de crear una web profesional.