¿Cómo aplicar las TICs a las pymes y autónomos?

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Estas son las utilidades básicas que tienen las TIC´s en la pequeña y mediana empresa:

  • Aplicaciones informáticas (Office, Adobe, AutoCad, Photoshop…), móvil, internet, etc.
  • Página Web y/o Blog de empresa.
  • Comercio electrónico: contratación online, factura electrónica, banca electrónica.
  • Publicidad electrónica: marketing online, mailing.
  • Certificados de confianza: Firma electrónica (DNI electrónico, identidad y firma digital).
Si no estás utilizando todas o al menos la mayoría de ellas, deberías planteártelo para mejorar la marcha de tu negocio.

 

Un ejemplo:

Un pequeño comercio tiene un local comercial y ofrece los productos expuestos. También recibe pedidos por teléfono porque ha hecho una campaña publicitaria mediante folletos repartidos en buzones. Recoger la información del cliente, anotar el pedido y preparar el envío requiere un trabajo y un plazo de tiempo. A su vez, llevar el inventario, hablar con los proveedores y solicitarlos materiales que faltan también suma tiempo y trabajo.

Si aplicamos las TICs al ejemplo, el comercio tiene además una página web en donde expone y vende sus productos (comercio electrónico las 24 horas del día todo el año), aumentando considerablemente su mercado. La gestión del pedido, es decir, la información y selección del material, los datos del cliente, la dirección de envío y la dirección de facturación la realiza el propio cliente, reduciendo de esta manera costes de tiempo y trabajo. El pedido llega al instante y el comercio puede gestionarlo, respondiendo (correo electrónico) al cliente en ese momento si es necesario. Un programa de control de existencias hace el seguimiento del material que se va a suministrar avisando de la necesidad de realizar nuevas compras a proveedor o, incluso, realizando el pedido de compra si está programado así. Se prepara el pedido del cliente y, a través de otro programa de distribución, se organiza la entrega. El pago del pedido también lo ha gestionado el cliente mediante banca electrónica (tarjetas de crédito) o dinero electrónico y se emite una factura electrónica.

En definitiva, se ha reducido el trabajo y el tiempo de respuesta; ha mejorado, agilizado y organizado la gestión del negocio; y ha aumentado notablemente el número de clientes potenciales.