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El embargo es una figura jurídica que supone retener un bien para asegurar que el titular del mismo pague una deuda. Si pasado un tiempo el deudor no ha cumplido con su obligación, el acreedor puede ejecutar el embargo.

En el caso de Administraciones Públicas como la Seguridad Social, cuando estas son acreedoras de una deuda no satisfecha, pueden proceder a la enajenación de los bienes embargados y cobrarse así su crédito con la cantidad obtenida en la subasta.

Es el Boletín Oficial del Estado (BOE) el que se encarga de dar conocimiento de la existencia de subastas públicas. Procesos en los que cualquier ciudadano puede hacerse con bienes como una casa o un coche de alta gama a precios mucho más bajos de los de mercado.

Subastas de coches embargados

Los coches están entre los bienes más buscados dentro de las subastas, porque estos procedimientos son la ocasión perfecta para hacerse con vehículos de alta gama a precios muy ajustados.

Entre los últimos ejemplos de coches que van a salir a subasta nos podemos encontrar un Jaguar XF de 2010 por poco más de 6.000 euros, o un BMW Serie 3 cuyo precio de subasta parte de 4.890 euros.

Por supuesto, también se pueden encontrar coches de gama media a precios bajos, e incluso modelos clásicos.

Subastas de inmuebles

Las subastas también son una buena forma de adquirir bienes inmuebles. No solo pisos o casas, también terrenos aptos para construir o para cultivo. Y lo mejor es que el precio de salida de la subasta puede llegar a estar incluso por debajo del valor catastral.

Una de las últimas ejecuciones publicadas en el BOE es la de un chalet en Paderne (A Coruña) por 32.606 euros, o una vivienda en Valencia por poco más de 72.000 euros.

¿Cómo funcionan las subastas?

A través de este enlace puedes acceder al buscador de subastas activas, seleccionando por provincia y hasta por ciudad. Si te interesa alguno de los bienes, debes acreditar tu identidad mediante DNI electrónico, certificado digital, usuario y contraseña o sistema Cl@ve de la Agencia Tributaria.

Cada subasta dura 20 días y hay que dejar en señal un 5% del precio ofertado. Llegado el día de finalización del proceso, este se cierra una hora después de la última puja. Si la oferta realizada es igual o superior al 50% del valor del bien, este es adjudicado a quien haya realizado la puja más alta. No obstante, la Administración puede aceptar una cantidad inferior si el interés público lo justifica.

El ganador de la subasta tiene 15 días para abonar el dinero, descontando el 5% que ya aportó antes. Una vez efectuado el pago, recibirá el bien. En caso de que no pueda efectuar el abono dentro de ese tiempo, perderá la señal y se adjudicará el artículo a la segunda puja más alta.

El resto de participantes cuya puja no haya resultado ganadora recibirán de vuelta el dinero que aportaron en su momento a forma de señal.

Por otro lado, mientras el ganador de la puja no haya recibido el acta que confirma que es el dueño del bien, el deudor embargado puede pagar la deuda y recuperar ese bien en cuestión. En este caso, la subasta quedaría sin efecto y al ganador de la misma se le devolverían todas las cantidades abonadas.

Organismos como la Seguridad Social y la AEAT llevan a cabo grandes cantidades de embargos, que en muchos casos recaen sobre coches y casas, pero que también pueden recaer sobre joyas, barcos, antigüedades… Esto hace de las subastas públicas un lugar interesante para adquirir bienes de gran valor a precios bajos. 

Revisar el BOE y la web de subastas del Ministerio de la Presidencia es una buena forma de estar al tanto de qué artículos se van a subastar. De hecho, dado que todos los días hay procedimientos de apremio que llegan a la fase de ejecución, lo normal es que casi a diario aparezcan nuevos bienes publicados que están listos para ser subastados.

Si tienes dinero líquido, las subastas son una forma diferente de añadir nuevos bienes a tu patrimonio de manera sencilla y a un coste más bajo que si compraras esos mismos bienes en el mercado.