Claves para trabajar la marca personal a través de LinkedIn

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Estamos en plena era digital y esto tiene unas consecuencias. Siendo una de las más evidentes la necesidad absoluta que tienen los profesionales que trabajan por cuenta propia de ganar visibilidad online para atraer nuevos clientes y fidelizar a los que ya tienen. Todo esto nos lleva directos a la importancia de la marca personal y la forma en que puede trabajarse a través de LinkedIn.

¿Qué es la marca personal?

La marca personal o personal branding es la forma en la que un profesional es percibido por el resto de personas. Es un concepto de marketing similar a la reputación, con la diferencia de que el titular de la marca tiene un papel muy importante en la imagen que transmite y en cómo es percibido por los demás.

Como profesional tienes que construir tu marca personal. Mostrarte a los demás justo como te gustaría que te vieran, e ir generando así una reputación que sea lo más positiva posible y te ayude a vender más.

La marca personal en LinkedIn

Hay muchas formas de trabajar el personal branding, pero no hay duda de que las redes sociales están entre los mejores canales para hacerlo. Y entre ellas destaca especialmente LinkedIn, puesto que es un Social Media con un corte totalmente profesional.

Pero, ¿cómo conseguir destacar entre tantos especialistas que hacen lo mismo que tú? Aquí van algunas ideas.

Ten claro tu objetivo al trabajar tu perfil de LinkedIn


Tu marca personal la creas tú. Eres tú quien decide lo que va a transmitir a los demás. Así que lo primero que debes tener claro son tus objetivos. A través de tu perfil debes conseguir que los demás no tengan dudas sobre quién eres, qué haces, cómo lo haces y qué te hace diferente de otros profesionales.

Crea un perfil que destaque

No te tomes el proceso de rellenar tu perfil en esta red social como una pérdida de tiempo. Al contrario, dedícale todo el tiempo que sea necesario y no pares hasta haber dado con la mejor fórmula para presentarte ante el mundo como profesional.

En LinkedIn hay muchos diseñadores web, abogados, consultores… Procura usar un titular atractivo que llame la atención. No te dediques a poner cosas típicas como “asesor fiscal” o “diseñador web”. 

Presta también atención al extracto. Un espacio en el que puedes hacer una pequeña descripción de quién eres a nivel profesional. Aquí también es conveniente recurrir a la originalidad e incluir información que de verdad pueda captar el interés de quien se ha tomado la molestia de entrar a ver tu perfil.

Añade una foto que sea profesional, pero olvídate de la típica foto del DNI. Y sonríe, porque está demostrado que una cara sonriente genera mucha más empatía.

Brilla en el apartado de experiencia profesional. Aquí sí puedes ponerte más formal y detallar cómo ha sido tu trayectoria hasta ahora. Pero tampoco exageres, destaca solo aquello que consideres que es realmente reseñable.

Un último consejo por lo que respecta al perfil, procura usar las palabras clave que sabes que ayudarán a otros usuarios a localizarte.

Establece tu red de contactos e interactúa con ellos

LinkedIn no es ni un currículum ni un portafolio, es una red social. Con esto queremos decir que no te limites a exponer lo buen profesional que eres, utiliza este canal con una finalidad más social.

Busca profesionales con los que hayas trabajado anteriormente y profesionales con los que no hayas trabajado pero cuyo perfil te interesa. Establece una relación a largo plazo a través de una interacción adecuada. Por ejemplo, si alguien ha conseguido un ascenso o una colaboración interesante, no dudes en felicitarle.

Aporta valor a tu red de contactos

LinkedIn es un lugar para compartir información. Si tienes un blog personal o creas contenidos para tu web tales como infografías o vídeos, o sencillamente has encontrado por ahí un contenido de calidad que crees que puede ser interesante, no dudes en compartirlo.

La idea es que poco a poco vayas convirtiéndote en alguien con especial relevancia dentro de tu red de contactos. Que los demás te vean como un especialista dentro de tu sector. Si lo haces bien, en poco tiempo te habrás ganado una buena reputación y tu marca personal estará lista para empezar a granjearte nuevos clientes.